Hay experiencias que nos cambian la vida por completo, experiencias que llegan sin pedirlas, pero que se quedan grabadas por siempre en el corazón y esta historia es una de ellas, es la historia de la experiencia mas bella de mi vida, la historia de aquel viaje que un día emprendí sin imaginar que ese viaje me llevaría a conocer a la persona que seria el complemento perfecto en mi vida, cuando me embarque en esta aventura pensé que era lo peor que me había pasado, odiaba viajar sola, pero amaba conocer lugares y gente nueva, pero en ninguno de los lugares que hasta entonces había conocido encontré lo que en Sligo, un pequeño condado al oeste de Irlanda, ahí fue donde la vida me tenia deparada una sorpresa, una sorpresa de amor, de un amor que me acompañaría toda la vida.

Formato	Tapa suave
Número de Páginas	88
Lenguaje	Español
Editorial	Createspace Independent Publishing Platform
Fecha de Publicación	2013-08-22
Dimensiones	11.0" x 8.5" x 0.18" pulgadas
Letra Grande	No
Con Ilustraciones	No

Mi nombre es Liliana Hernández Zurita, nací el 27 de Diciembre de 1982 en la ciudad de Oaxaca, México. Tras terminar los estudios de bachillerato y tomar el curso de iniciación para cursar la Licenciatura de Relaciones Internacionales y desertar de dicho curso, me di a la tarea de buscar día tras día aquello que en verdad le diera un sentido a mi vida, aquello que realmente me hiciera feliz. Comencé a escribir sin darme cuenta de lo que hacía, sin prestarle demasiado interés, pero escribiendo todo aquello que soñaba, generalmente todo aquello que tuviera que ver con el amor, con historias que siempre terminaran con un "vivieron felices para siempre". Así que, sin saber nada del amor propiamente, sin tener una carrera universitaria que me avalara como escritora seguí escribiendo y seguiré haciéndolo porque no imagino mi vida haciendo algo diferente, porque amo sentarme frente a mi computadora, cerrar los ojos e imaginar y crear historias que nacen de mi corazón, historias llenas de color, de color rosa preferentemente y de aroma dulce pero también llenas de algunas gotas de amargura, pues quien no conoce el dolor y el sufrimiento difícilmente sabe conocer el amor, la compasión, la fe, la fe en lo que somos pero también en lo que podemos llegar a ser si somos capaces de seguir lo que nos dice nuestro corazón.