Este libro nos habla de la gracia de Dios, la cual es libremente otorgada y recibida. El reverendo Eliezer Torres utiliza el Salmo 23, "El Señor es mi pastor" y los evangelios de Pablo y Saúl, para explicarnos este maravilloso don. Por medio de su libro, El Manto de la Gracia, el Pastor Torres narra con mucho acierto, la transformación espiritual y física que por obra de la gracia Divina él logra experimentar como resultado de su entrega incondicional a Dios. Así todos podemos ser partícipes del regalo de salvación de nuestro Señor Jesucristo, cuando lo aceptamos y lo alabamos, profundamente.

Formato	Tapa suave
Número de Páginas	104
Lenguaje	Español
Editorial	Createspace Independent Publishing Platform
Fecha de Publicación	2014-04-10
Dimensiones	7.8" x 5.08" x 0.22" pulgadas
Letra Grande	No
Con Ilustraciones	No
Temas	Cristiano

El reverendo Eliezer Torres nace en la ciudad de Bayamón de Puerto Rico. Siguiendo la tradición familiar, se ordena como pastor en la iglesia de los "Discípulos de Cristo" en 1966. Al mismo tiempo continúa con sus estudios en la facultad de Bellas Artes de la Universidad de Puerto Rico, licenciándose en Filosofía e Historia en 1968. Continúa sus estudios superiores en el Seminario Evangélico de Puerto Rico, obteniendo una maestría en Teología en 1971. A partir de este momento, el reverendo y profesor Torres da clases de religiones comparativas y ética en la Universidad Interamericana de Puerto Rico. Simultáneamente, el joven pastor es exitoso en la creación de nuevas y vibrantes congregaciones, incluyendo a la iglesia Presbiteriana de Puerto Rico. Luego continúa su misión evangelizadora cuando pasa a trabajar en la propuesta del gobierno federal de los Estados Unidos en Puerto Rico. Fue director y fundador de los Centros Comunitarios de la cuidad de Bayamón, con el propósito de rescatar la juventud de las clases más desposeídas, las cuales eran asechadas por la drogadicción, alcoholismo, prostitución y crimen. También, fue representante del Concilio Mundial de Iglesias al trabajo social en la República Dominicana, bajo el ministerio del misionero Juan Marcos Rivera. En 1987 emigra permanentemente, junto a su esposa e hijos, a los Estados Unidos. Allí continúa su llamado evangelizador, la escritura cristiana y el ministerio de labor social comunitaria.