Siluetas en Piedra Azul de la autora cubana Yolanda Ortal-Miranda, es un mosaico cautivador de personajes producto de la imaginación de la escritora, que viven en la también imaginaria y pintoresca villa llamada Piedra Azul, donde hay un pequeño college que sirve de escenario para la novela, la cual contiene una mágica mezcla de personas fascinantes, con sus sueños, excentricidades, debilidades, pasiones y aspiraciones, narrada con muy buen humor, riqueza de lenguaje sin excesos y un estilo muy personal, no carente de poesía e ironía. Ésta, su tercera novela, tiene un tema y tono totalmente diferente a sus obras anteriores. Siluetas en Piedra Azul desarrolla un tema interesante para todo ser observador, que se pregunte acerca de "la persona total, la verdadera y real" que creemos conocer, por ejemplo, la enfermera en el hospital o en este caso, el competente profesorado, ante la clase; la persona profesional actuando como tal, y el otro ser humano -desconocido fuera de su escenario- que somos todos, cuando no estamos ejerciendo nuestro "papel," bajo contrato, en la sociedad, al funcionar en casa, como parte de un núcleo familiar, sin dejar de ser médico, profesora, piloto, arquitecto, abogada, o policía.