Dicen que al morir, la persona ve pasar por su mente toda su vida en unos instantes. Nadie ha vuelto para corroborarlo. En los pueblos es igual, con la salvedad, de que podemos verlo, aunque la muerte no es instantánea, sino paulatina. En este pueblo desapareció primero una persona como un presagio. Luego una familia, luego otras. Un día desaparecieron las lluvias, se secaron los caudales, cambiaron las costumbres, las formas de subsistencia, hasta que desapareció el pueblo. Unos buscando su destino, otros huyendo de él. El día que Juan Montoya desapareció, todo parecía ser el cumplimiento de un presagio. Tras una serie de acontecimientos misteriosamente ligados, la comunidad del rancho El "Álamo", en el municipio de Villa Matamoros, Chihuahua, se estremeció ante su desaparición. Hecho que vino a trastocar la rutinaria tranquilidad de sus habitantes proyectándolos a una autocrítica, buscando curarse en salud ante la posible culpa colectiva.Cada personaje en este rancho sobresalía por algunas características personales únicas, pero el caso de Juan era muy evidente. Juan "patas largas", le decía la gente en referencia a su estatura, que sobresalía unos centímetros sobre el hombre más alto del lugar, o quizá para distinguirlo de otro Juan que vivía en el mismo rancho y a quien por su baja estatura le decían "patas cortas". Era un hombre de pocas palabras, bastante callado, de pausado andar, "bastante pausado", bromeaba la gente.

Formato	Tapa suave
Número de Páginas	162
Lenguaje	Español
Editorial	Createspace Independent Publishing Platform
Fecha de Publicación	2014-07-01
Dimensiones	9.0" x 6.0" x 0.35" pulgadas
Letra Grande	No
Con Ilustraciones	No