Como un ave, que presa y con cadenas, ... no puede volar, así estaba mi alma, presa en la oscuridad. Muchas veces pensé, que jamás podría salir de ese hoyo profundo en el que estaba, cuando de pronto, alguien incomparable a ningún hombre o mujer que habite este planeta tierra, dijo a mi alma: Aquí estoy... yo te amo. Yo morí en la cruz del calvario, para darte vida, sanar tus enfermedades del cuerpo, pero especialmente las que tanto te agobian y están alojadas en tu alma, por todo lo que el hombre te ha lastimado. Yo soy tu Dios, quien te prospera y te levanta. Solo pídeme, confía en mí, aférrate a mí y yo hare lo demás. Tu eres un águila...!!!, ... por lo tanto levántate de donde tu estas .... que yo soy tu fortaleza y tu ayudador, y junto a mí, caminaras los caminos de la victoria, hacia la meta que es el cielo, en el que vivirás por toda una eternidad, cuando venga a buscarte junto a todos mis hijos en el arrebatamiento. Levántate hija mía... y comienza a volar, que nunca estarás sola....!!! Yo, ... tu Dios estaré contigo, ... hasta el fin ... !!!.
Detalles
Formato
Tapa suave
Número de Páginas
114
Lenguaje
Español
Editorial
Palibrio
Fecha de Publicación
2011-04-06
Dimensiones
8.5" x 5.5" x 0.27" pulgadas
Letra Grande
No
Con Ilustraciones
No
Descripción
Como un ave, que presa y con cadenas, ... no puede volar, así estaba mi alma, presa en la oscuridad. Muchas veces pensé, que jamás podría salir de ese hoyo profundo en el que estaba, cuando de pronto, alguien incomparable a ningún hombre o mujer que habite este planeta tierra, dijo a mi alma: Aquí estoy... yo te amo. Yo morí en la cruz del calvario, para darte vida, sanar tus enfermedades del cuerpo, pero especialmente las que tanto te agobian y están alojadas en tu alma, por todo lo que el hombre te ha lastimado. Yo soy tu Dios, quien te prospera y te levanta. Solo pídeme, confía en mí, aférrate a mí y yo hare lo demás. Tu eres un águila...!!!, ... por lo tanto levántate de donde tu estas .... que yo soy tu fortaleza y tu ayudador, y junto a mí, caminaras los caminos de la victoria, hacia la meta que es el cielo, en el que vivirás por toda una eternidad, cuando venga a buscarte junto a todos mis hijos en el arrebatamiento. Levántate hija mía... y comienza a volar, que nunca estarás sola....!!! Yo, ... tu Dios estaré contigo, ... hasta el fin ... !!!.
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