Los aperitivos son bocadillos que se suelen servir antes de una comida o entre comidas, y también se denominan entremeses, antipasti o entrantes, y pueden variar desde lo más simple hasta lo más complejo, según la ocasión y el tiempo dedicado a haciéndolos. Son un acompañamiento habitual de los aperitivos, cócteles que se sirven antes de la comida.

En cenas, banquetes y similares, se pueden servir aperitivos antes de la comida. Esto es especialmente común en las bodas cuando a los invitados y a los invitados les lleva tiempo llegar a la recepción después de que se ha celebrado el matrimonio. Los aperitivos se pueden servir en fiestas largas que se celebran después de una comida habitual. Una fiesta a media tarde en la que no hay intención de servir la cena, o una fiesta nocturna que se realiza después de la cena, puede incluir aperitivos para que los invitados tengan la oportunidad de comer algo. Muchos restaurantes ofrecen una variedad de aperitivos que se piden justo antes de la comida como primer plato.

Los aperitivos deben ser grandes en sabor, pequeños en tamaño y precio. El aperitivo debe tener un sabor distintivo y picante y cualidades que abran el apetito. En su fabricación desempeñan un papel destacado los encurtidos y salazones, los ácidos, la pimienta y el pimentón. Ostras y almejas crudas, pomelos, melones y cócteles de frutas, canapés y pequeños sándwiches untados con pastas de sardinas, anchoas y caviar, langosta y cangrejo, queso, aceitunas y otras mezclas de alto sabor, huevos rellenos, pequeñas ensaladas suculentas, todos pueden ser incluidos sin perjuicio en la lista de aperitivos. En algunas partes de Estados Unidos, la cena siempre comienza con la ensalada como aperitivo.