En esta historia relato lo simple y lo complicado de una amistad, donde la comunicación es un factor muy importante. Cuando abrimos las puertas de nuestro corazón a las personas, debemos tomar en cuenta que lo bueno y lo malo que nos ocurre también los afecta a ellos/ellas desde el momento que decidieron tomar parte en nuestras vidas. Y es importante recordar siempre que tan solo con un par de palabras se le puede cambiar el rumbo a cualquier historia.

Formato	Tapa suave
Número de Páginas	24
Lenguaje	Español
Editorial	Palibrio
Fecha de Publicación	2020-01-13
Dimensiones	8.5" x 8.5" x 0.07" pulgadas
Letra Grande	No
Con Ilustraciones	No

Nací el 24 de febrero de 1981, de padres guatemaltecos. Viví en Guatemala de 1993 a 1997 y crecí en un municipio llamado San Rafael las Flores. Disfruté mi estancia en el municipio donde a temprana edad me di cuenta de que disfrutaba mucho escribir. Mi primer diario fue un obsequio de una tía llamada Mirna. En ese diario escribía todo lo que pensaba y lo que me ocurría. Siempre fui una niña obediente, para mí solo existían el sí o el no. A temprana edad aprendí a disfrutar la naturaleza, las tradiciones de familias y mi cultura guatemalteca. Desde pequeña nunca me sentí identificada con nadie, siempre estuve muy metida en mis pensamientos y en mis propias ideas. Era extremadamente tímida y nunca fui de muchas amigas, pero sí de muchas conocidas. A esta edad ahora entiendo que siempre fui de una personalidad introvertida entre personas extrovertidas que nunca podrían comprenderme. Cuando llegué a la adolescencia, finalmente me identifiqué con alguien que llegó a formar y marcar huella en mi vida. A esa persona la recordaré siempre con el más sincero cariño porque de ahí surgió la historia de Coqueto. Hoy en día soy madre de una hija con personalidad extrovertida y a diario intento comprender su personalidad tan distinta a la mía.